Política de Diversidad, equidad e inclusión: ¿Por qué son importantes para la empresa?
El mundo está cada vez más globalizado y tiene un mercado laboral más competitivo. Las empresas se enfrentan al reto de adaptarse a las cambiantes necesidades y expectativas de sus clientes, empleados, accionistas y otros grupos de interés.
Quienes se sienten libres y respetados en su lugar de trabajo tienden a desarrollar mejor todo su potencial profesional. Por lo tanto, es esencial que toda empresa promueva una política de diversidad, equidad e inclusión.
Establecer una política de diversidad, equidad e inclusión impulsa el aprendizaje continuo y acelera el crecimiento empresarial.
Pero, ¿qué son la diversidad, equidad e inclusión? Es importante que conozcas el correcto significado de estas palabras, así que daremos un breve repaso a los conceptos.
En primer lugar, la diversidad se refiere a la variedad de características que hacen única a cada persona. Así como, el género, la edad, la etnia, la orientación sexual, la discapacidad, la religión, la educación o la personalidad.
Por otro lado, la equidad hace referencia al trato justo e imparcial que se brinda a cada persona. Este trato debe adecuarse a las necesidades y potencialidades de cada individuo, pero no da cabida a la discriminación o el favoritismo.
Por último, la inclusión se refiere al sentido de pertenencia y participación que se genera en un ambiente laboral donde se respetan, valoran y promueven la diversidad y la equidad.
Ahora que ya lo sabes, podemos adentrarnos de lleno al tema. En este artículo te explicaremos con mejor detalle por qué es tan importante que tu empresa cuente con una política de diversidad, equidad e inclusión ¡Síguenos en la lectura!
¿Qué es política diversidad y equidad en la inclusión?
La diversidad y equidad en la inclusión son conceptos interrelacionados. Implican reconocer y aprovechar las diferencias individuales y colectivas como una fuente de riqueza y oportunidad para la empresa.
Proponen que todos los colaboradores tienen derecho a ser tratados con dignidad y respeto; además de acceder a las mismas oportunidades de desarrollo profesional y personal. Por supuesto, mientras contribuyan al logro de los objetivos empresariales.
Toda empresa con una política de diversidad, equidad e inclusión abre paso a la tolerancia, empatía, apoyo y trato igualitario de sus empleados.
De igual forma, suponen compromisos éticos y sociales por parte de la empresa. Tales como el respeto a los derechos humanos, la igualdad de género, la no discriminación y la erradicación de toda forma de violencia, acoso o exclusión en el entorno laboral.
Por ende, representan una responsabilidad con el entorno social y ambiental en el que opera la empresa. Siempre procurando un impacto positivo en las comunidades con las que interactúa.
¿Qué prácticas garantizan la inclusión y la igualdad en la empresa?
Es necesario que toda empresa cuente con una política de diversidad, equidad e inclusión. Una donde se establezcan los principios, objetivos y acciones que orienten el comportamiento y las decisiones de todos los miembros de la organización.
Así bien, una política de este tipo debe ser coherente con la visión, misión y valores de la empresa. Al igual que con las normas legales vigentes en materia de derechos humanos y laborales.
De esta forma, una política de diversidad, equidad e inclusión dentro de cualquier organización debe contemplar los siguientes aspectos:
- El compromiso de la alta dirección con el liderazgo y el impulso de una cultura inclusiva y equitativa.
- La definición de roles y responsabilidades de los diferentes niveles jerárquicos y áreas funcionales.
- La asignación de recursos humanos, financieros y materiales para el desarrollo e implementación de la política.
- La identificación de los grupos prioritarios o vulnerables que requieren una atención especial o medidas específicas para garantizar su inclusión y equidad.
- La formulación de objetivos medibles y verificables que permitan evaluar el avance y el impacto de la política.
- La elaboración de planes de acción concretos que incluyan actividades, indicadores, plazos y responsables para alcanzar los objetivos propuestos.
- La comunicación interna y externa de la política para generar conciencia, sensibilización y compromiso entre todos los grupos de interés.
- La capacitación continua del personal en temas relacionados con la diversidad, equidad e inclusión para mejorar sus competencias y habilidades.
- La creación de mecanismos de participación, consulta y retroalimentación que permitan recoger las opiniones, sugerencias y reclamos del personal sobre el funcionamiento e impacto de la política.
¿Cómo se promueve una política de diversidad e inclusión en la empresa?
Promover la diversidad e inclusión en la empresa no solo es una cuestión de responsabilidad social o ética, sino también de competitividad y rentabilidad. Los beneficios de contar con equipos diversos e inclusivos son extensos. Veamos algunos a continuación:
- Mayor innovación, creatividad y adaptabilidad para los equipos laborales y la obtención de resultados más efectivos.
- Mejor comprensión de las necesidades y expectativas de los clientes por parte de los empleados.
- Mayor atracción y retención del talento, gracias a la valoración de las distintas capacidades del capital humano.
- Mejor clima laboral y satisfacción de los empleados por la demostración de respeto entre los iguales.
- Menor riesgo de conflictos o discriminación; pues, entre más respeto y valoración se comparta en el ambiente laboral, mejores serán los resultados obtenidos.
- Mayor reputación y reconocimiento social de la empresa en el mercado en donde compite, por ser conocida como una organización que valora y respeta a las distintas culturas.
La política de diversidad, equidad e inclusión mejora el entorno laboral y garantiza mejores resultados en el cumplimiento de los objetivos empresariales.
Ya que conoces sus beneficios, seguro te preguntas cómo puedes promover la diversidad e inclusión en tu empresa. Es importante comprender que requiere de una estrategia integral que involucre a todos los niveles y áreas de la organización. Así, algunas acciones que se pueden implementar son:
- Definir una política y un plan de acción de diversidad e inclusión. En ella se deben establecer los objetivos, acciones, indicadores y responsables de su ejecución y seguimiento.
- Sensibilizar y capacitar a los líderes y empleados sobre la importancia y valor de la diversidad e inclusión. Así como sobre las buenas prácticas para fomentarlas en el día a día.
- Incorporar criterios de diversidad e inclusión en los procesos de selección, formación, evaluación, desarrollo y promoción del personal. De tal forma que se asegure la igualdad de oportunidades y el trato justo para todos.
- Crear espacios de diálogo, participación y colaboración entre colaboradores; respetando sus diferencias y potenciando sus sinergias.
- Impulsar iniciativas que reconozcan y celebren la diversidad e inclusión en la empresa. Pueden ser eventos, premios, redes internas o campañas de comunicación.
Establecer alianzas con otras organizaciones o entidades que promuevan la diversidad e inclusión en el entorno social y económico.
Conclusiones
Promover la diversidad e inclusión en tu empresa puede ser un reto; pero, también, una gran oportunidad de crecimiento. Es un factor que ayuda a mejorar el desempeño, el bienestar y la sostenibilidad de todos tus empleados.
Se trata de un proceso continuo que requiere del compromiso y la implicación de todos los individuos involucrados. Y, aunque puede ser difícil, se ha convertido en un factor clave para generar valor añadido y diferenciarse en un mundo cada vez más globalizado y cambiante.
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