Situaciones de inteligencia emocional que tanto líderes como colaboradores deben conocer
Las situaciones de inteligencia emocional requieren de la habilidad que tienen algunas personas para identificar, expresar, gestionar y comprender las emociones propias y ajenas. Y, por fortuna, es un tipo de inteligencia que puede desarrollarse y potenciarse durante todas las etapas de la vida.
Cuando tomas conciencia de ti mismo y de tu entorno, comienza tu camino de inteligencia emocional. Aprendes a reconocer que tus comportamientos y decisiones tienen impacto en terceros y en sus emociones.
En este post, te contamos todo lo que necesitas saber sobre las situaciones de inteligencia emocional.
El impacto de conocer la Inteligencia Emocional
La inteligencia emocional tiene múltiples beneficios; no sólo a nivel personal, sino en todos los ámbitos de la vida donde te desarrolles. Esta sabiduría te permitirá mejorar tu bienestar físico, psicológico y social.
En este video, conoce más sobre qué es la inteligencia emocional:
El desarrollo de la inteligencia emocional te permite un crecimiento personal a pasos agigantados.
Hay situaciones de inteligencia emocional que necesitarán del conocimiento y desarrollo óptimo de estas habilidades. Entre los beneficios de aprender más sobre la gestión de la inteligencia emocional, podemos destacar:
- La capacidad de generar estados de ánimo positivos
- Mayor creatividad
- La adaptación a situaciones difíciles
- El control de los cambios emocionales y los impulsos
- El goce de una mejor estabilidad psíquica y psicológica
Situaciones en las que la inteligencia emocional es clave
La inteligencia emocional te ayudará a tomar las decisiones correctas en diversas situaciones sin que se vea afectada tu integridad física y mental.
Las situaciones de inteligencia emocional son aquellas donde nos es de suma utilidad saber regular nuestra forma de actuar ante algo que nos disgusta, por ejemplo.
Veamos cuáles son las situaciones o acciones en donde debemos entrenar y gestionar nuestras emociones:
1. Desconocer las emociones
El abanico de emociones es mucho más amplio de lo que considera la mayoría de las personas. Es importante conocerlas para poder identificarlas. A esto se le llama ampliar el vocabulario emocional.
Cuando no logramos poner en palabras lo que sentimos, podemos correr el riesgo de tomar decisiones equivocadas.
2. Facilidad para estresarse
Las personas que no logran gestionar sus emociones de manera adecuada suelen tener miedo a sus reacciones y las acumulan. Esto da como resultado que tengan mayor estrés, ansiedad y mayores probabilidades de tomar malas decisiones.
Aprender a expresar las emociones en el momento oportuno y de la manera adecuada disminuirá tus niveles de estrés y ansiedad.
Expresar las emociones de la manera adecuada y en el momento oportuno tiene múltiples beneficios para nuestra salud física y mental e impide que nos transformemos en una bomba de tiempo.
3. Comunicación poco asertiva
La asertividad es una forma de comportamiento que da lugar a la empatía y a la serenidad. Cuando comunicamos algo asertivamente, el mensaje es recibido de una manera más positiva.
Una comunicación asertiva permite gestionar mejor los conflictos, nos brinda calma y equilibrio. También nos permite demostrar autocontrol, una característica muy útil en el liderazgo.
4. Posiciones inamovibles
Las personas con poca o nula inteligencia emocional suelen formar opiniones rápidas y asumir posturas con pocos fundamentos. Además, su orgullo no les permite considerar otras posibilidades o escuchar opiniones diferentes.
Ser inteligente con tus emociones te da cierta apertura y perspectiva, por lo que podrás conocer otras visiones que, seguramente, enriquecerán las tuyas. Si te encierras en tu única opinión, disminuye tu panorama.
5. Guardar rencor
El rencor es un mal hábito que demuestra una gestión ineficaz de las emociones. Guardar rencor solo nos trae sentimientos negativos.
La clave para crecer está en comprender y soltar aquello del pasado que aún nos hace daño. Las personas emocionalmente inteligentes se centran en el presente porque saben que es aquí donde están las posibilidades.
6. Sentimiento de incomprensión
La incapacidad de comunicar las emociones puede hacerte sentir incomprendido. Sin embargo, si sabes comunicar lo que sientes de una manera adecuada y asertiva las personas podrán comprenderte y actuar en consecuencia.
Las personas con inteligencia emocional aprenden a comunicar sus emociones y no esperan que los demás las adivinen, sino que sus mensajes son claros y resolutivos.
7. Enfocarse en los errores
Las personas emocionalmente inteligentes comprenden que todas las personas cometen errores y las equivocaciones no nos quitan valor.
En cambio, aprender de nuestros errores nos permite corregir aquello que no salió como esperábamos y nos impulsa a ser mejores.
8. Facilidad para ofenderse
Cuando la inteligencia emocional es poca o nula, las personas demuestran cierta facilidad de sentirse ofendidas o agredidas cuando hay críticas hacia ellos. No suelen distinguir las críticas negativas de las constructivas, todo lo toman como un insulto hacia ellos.
Las personas que son inteligentes con sus emociones demuestran seguridad porque saben lo que son capaces de lograr. Además, son flexibles y de mente abierta porque no temen a escuchar otras opiniones.
Esta inteligencia te permite gestionar lo que sientes cuando escuchas críticas y evita que seas reactivo o dañino con terceros.
9. Culpar a otros
La falta de autoconocimiento puede tener como consecuencia que tus acciones o reacciones sean irresponsables. Por ejemplo, culpar a otros de nuestros fracasos puede herirlos y demuestra que somos poco considerados con las emociones ajenas.
Ser emocionalmente inteligentes nos permite comprender que nadie es más responsable de nuestras acciones que nosotros mismos y que cada cosa que hacemos puede tener repercusiones en los demás.
Conclusiones
Son muchas las situaciones que podrás sortear con éxito si desarrollas tu inteligencia emocional. En todos los ámbitos, incluido el laboral, te será de utilidad atender a tus emociones y a la repercusión de tus actos.
La inteligencia de las emociones reconoce todos los aspectos de la vida y los tipos de relaciones interpersonales. Este tipo de inteligencia conlleva muchos beneficios para quienes la desarrollan.
En el trabajo, es imprescindible contar con esta habilidad blanda porque te ayudará a sortear obstáculos o conflictos con entereza. Es decir, sin que se vea afectada tu salud física y mental.
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