Claves para el liderazgo de equipos remotos

17/04/2020

Además de dotar a los equipos de las herramientas digitales que faciliten su labor, un liderazgo de equipos remotos efectivo debe consensuar con ellos objetivos y plazos, dar feedback de manera frecuente o fomentar la colaboración entre ellos.

En situaciones de emergencia sanitaria, donde el confinamiento de las personas es una de las medidas clave, una de las fórmulas que han adoptado en masa las empresas para paliar el golpe es el teletrabajo. Todos conocemos ya de sus bondades (flexibilidad, conciliación, trabajo por objetivos, etc.), pero, hasta la irrupción del Coronavirus, pocos eran los que se beneficiaban de todas ellas. Y es que, si bien es cierto que la progresiva digitalización de empresas y procesos y la formación digital de las fuerzas laborales han ayudado a democratizar conceptos como el trabajo en remoto y el Smart Working, todavía no se trata de una práctica demasiado extendida.

Objetivos claros y medibles para un liderazgo de equipos remotos efectivo

liderazgo de equipos remotos

El tiempo dirá si los engranajes forjados a contrarreloj una vez decretada la alarma son lo suficientemente férreos como para extender el trabajo en remoto en una gran cantidad de organizaciones a futuro, pero mientras tanto, son varias las compañías que esgrimen una serie de consejos para implementar el trabajo en remoto de la forma más efectiva posible. Entre ellas, muchas destacan la de fijar objetivos claros y medibles que deben ser comunicados por parte del responsable a cada uno de los empleados; recurrir a la tecnología como aliada, bien para comunicarse, compartir documentos o realizar tareas; establecer dinámicas de equipo que repliquen al máximo las dinámicas cotidianas que tendríamos en la oficina o huir del aislamiento manteniendo una comunicación fluida con compañeros y responsables, algo fundamental para la motivación.

Muchas hacen especial hincapié en la figura de los responsables de equipos. Es muy importante saber comunicar de forma clara los objetivos, animar a su equipo a trasladar las dudas si no ha quedado algo claro, convocar reuniones a través de videoconferencias y, en el transcurso de las mismas, recordar la importancia de escuchar y preguntar al que está al otro lado a la vez que se respeten los turnos de palabra. Si tenemos en cuenta esta base mínima, las jornadas laborales a distancia se convertirán en una oportunidad empresarial y no en un problema.

Networking

Si tuviéramos que reducir los requisitos del trabajo en remoto solo a dos, estos serían la comunicación y la tecnología. El resto de elementos que facilitarían el trabajo podrían incorporarse y perfeccionarse a posteriori. De la unión de comunicación y tecnología, no obstante, surge un concepto a tener muy en cuenta durante este tiempo, el networking entendido como herramienta estratégica para seguir conectados, posibilitar el trabajo en equipo y mantener la productividad. A ello contribuyen herramientas que permiten tener conferencias con varias personas, trabajar documentos online, compartir pantalla o enviar archivos de calidad. Es el caso de Google Suite, Microsoft Office 365 o Dropbox. Es necesario familiarizarse, asimismo, con aplicaciones como Skype, Hangouts y otros programas de videoconferencia y chats online, así como con herramientas colaborativas como Google Drive, Microsoft Teams, Asana y Trello, que evitan la comunicación y el trabajo solo por email.

¿Crees estar preparado para el reto que supone liderar equipos remotos?